

«Este libro es de memorias porque está escrito de memoria. Para algunos episodios me he guiada por las anotaciones de mis diarios, y otras veces, las menos, de oídas. No digo que todo lo que se cuenta aquí sea verdadero, porque sería imprudencia creerse en la posesión de la verdad, a esta alturas, pero, cuando menos se basa en una experiencia propia. Algunos episodios, sin duda, han sido difuminados por el paseo del tiempo; en otros puede que ofrezca una versión demasiado personal: pero de no darse una versión personal de aquellos años, lo que hay que contar es poco y puede resolverse el expediente hojeando las colecciones de las hemerotecas. También es posible que en alguna página me deje llevar por fobias y afectos. En lo que a los afectos se refiere, nada he de añadir: soy persona afectuosa y quiero tanto a mis amigos como odio y desprecio a mis enemigos; y, por descontado, sé que tengo muchos más amigos que enemigos. En cuanto a éstos, reconozco, con Borges, que hay que tener mucho cuidado con ellos, porque siempre acaban transmitiéndonos algo de su mezquindad; y los míos, por desgracia, son de la peor calaña».
Vísperas del nuevo tiempo. Libro de tapa blanda con solapas, 323 páginas.
Pentalfa Ediciones, Oviedo, 1991.